Poco a poco y como ya se preveía, la nueva edición del programa está cayendo en picado. Y es que la cifra de audiencia nos lo demuestra, pues la emisión del segundo debate de GH ha superado el millón de espectadores (1.040.000) por los pelos, teniendo tan sólo un 8,2% de cuota de pantalla y siendo, por el momento, la edición menos vista de la historia del formato.
La cadena tendrá que esperar a que empiecen a surgir tramas dentro de la casa para despertar el interés de los espectadores que no quieren adaptarse a los cambios de esta edición.
En el debate se trataron todas las novedades que se han producido en la casa estos últimos días, siendo gran tema de conversación el acercamiento que se está produciendo entre los dos gallegos Míriam y Rubén, así como el primer «edredoning» de la casa, protagonizado por José María y Carlota.
También se comentó la situación de Petra que se encuentra rayada y comentó en el jardín que “mi corazón está un poco revuelto. Mi marido es 18 años mayor y hemos tenido momentos bonitos, pero los últimos años han sido un desastre. Solo me sabe mal porque entré aquí para desconectar y lo he hecho a un nivel estratosférico”.
Estuvo presente también en el debate Nerea, la primera expulsada que no tardó en defender sus actos y justificar su eliminación echando la culpa a la mala gestión de Mediaset España del reality show. «Quiero decir una cosa: a mí se me ha juzgado por una semana en la casa por vídeos que se han podido editar y cortar. Vale que son mis actos, pero si hubiera existido el canal 24 horas, eso no hubiera pasado y si hubiera votado la audiencia, tampoco».
